Entre sombras de otoño intente hallarte, pero el sol se oculto y tu sombra perdí, trate buscarte por tu olor, pero el viento lo disperso, cuando fui a buscarte por última vez, te halle, solo encontré una mirada de desprecio y a lo lejos solo tu espalda me mostraste, en mi mente te abrazaba y las lagrimas te acariciaban. él dolor gritaba fuerte: que te hice? y el corazón solo tartamudeaba: solo quise estar ahí para ti! , quisiera tener el cuchillo de la verdad y despellejarte tu piel, quedando así tu alma desnuda y vulnerable mostrándote como eres, nuestros cuerpos desnudos conocemos y no debemos avergonzarnos, sé que esto es algo nuevo para cada uno, pero las emociones no son malas, ni lo sentimientos sucios, sin darnos cuenta bailamos en el límite del trapecio, alimentando el morbo caliente de estos fieles espectadores, pero a mí nunca me importo.
A pasado tiempo después del adiós, las estaciones pasaron y perdimos el tren, el café se sirvió pero se enfrió ya que nadie fue a tomarlo, las hojas caen en otoño de forma natural lo cual me gusta contemplar, quedando los arboles desnudos mirándose entre sí, esperando la primavera que traerá color, frutos y aves que hagan sus nidos en ellas; los ángeles danzan porque hay algunas manos que se levantan hacia el cielo, los querubines crean nuevas baladas de amor, Dios busca a quien mirar para poder rozarlo al menos con un dedo, abrazos que se vuelven extraños, corazones que se arrugan como papel ,pétalos de rosa que se marchitan y roció que cae a tierra muerta, así quedo en lo que creí en un momento, recuerdos mojosos que ahora están guardados en un baúl viejo que se pierde en el olvido, el lugar secreto que tenia se desmorono con mi fe.
Ahora estoy sin saber a dónde ir, caminado por la playa en la tarde, mirando el mar azul que dispersa mi mente como un cigarro o un vino que calma mi alma, veo mis huellas que son borradas por las olas, así pudiendo comenzar algo nuevo, sintiendo como la briza acaricia mi rostro haciéndome sonreír, veo los muertos del pasado a la orilla que me miran fijamente, empezando ellos a llorar, me acerco y les digo: descansen en paz...!
Autor Intelectual : JULIO CESAR PIZARRO IRALAⒸ 2011 El diario de Julian y 2 mas. ALL RIGHTS RESERVED